Se trata de un cántaro biglobular de tipo Obrajuelo Ordinario Modelado, bícromo elaborado entre los años 600 y 1100 d. C. periodo conocido como Fase Lepa.
La ministra de Cultura, Mariemm Pleitez, recibió el 16 de junio, una pieza arqueólogica extraída de nuestro país en 1972, la cual se encontraba en custodia del cónsul honorario de El Salvador en Hamburgo, Alemania, Arthur Ernesto Darboven.
El diplomático recibió la pieza como legado anónimo de un turista fallecido, quien lo sustrajo de El Salvador en 1972 y dejó instrucciones de que, al morir, dicho bien fuese retornado a El Salvador, por lo que la entrega se dio en calidad de bien recuperado en repatriación al Ministerio de Cultura.
La ministra Pleitez agradeció la devolución: “Es importante regresar las piezas adonde pertenecen porque el significado lo tienen aquí, debe ser compartido y expuesto por los dueños de esta cultura. Estamos contentos de que haya custodiado la pieza y que haya regresado al país para que otros salvadoreños puedan reconstruir la historia de El Salvador”, dijo la funcionaria.
“Siento un especial orgullo que hoy puedo entregar esta pieza en este museo que lleva el nombre de mi tatarabuelo (David J. Guzmán) y eso me llena de orgullo”, manifestó el cónsul honorario Darboven.
La pieza presenta características antropomorfas, brazos a manera de asa, y pertenece al tipo Obrajuelo Ordinario Modelado. Se considera que es una pieza de la región cercana al sitio arqueológico Quelepa, en la zona oriental del país.
La fase Lepa, en la que se ubica la pieza, se ubica en el período Clásico tardío (600-900 d. C.) e inicios del período Postclásico temprano (900 al 1200 d. C.).
El bien cultural pasará a formar parte de la Colección Nacional de Arqueología que custodia la Dirección Nacional de Patrimonio Cultural, a través de la Dirección de Registro de Bienes Culturales.
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